lunes, 21 de julio de 2008

Día 8: Rompiendo propósitos

Soy perfectamente consciente de que ayer no escribí. Bueno, he resistido seis días escribiendo a diario. Yo pensaba que aún rompería antes esta tendencia. Además, era domingo y supongo que incluso una servidora se merecía un día de fiesta. Los domingos son días tan lentos y perezosos que una no tiene ganas de hacer absolutamente nada. De hecho también tengo que confesar que este fin de semana no he cumplido con mi propósito de leer cuarenta páginas diarias. Sólo he leído 25. Pero es que tradicionalmente el fin de semana siempre leo menos y conté que, si cada día leía 40 páginas menos los fines de semana que serían 25 diarias, esto daba un total de 250 páginas por semana y en cuatro semanas podía terminar igualmente el libro, porque 250 multiplicado por 4 son 1000 y el libro, de hecho, tiene 1000 páginas si no contamos las notas a pie de página. El problema es que ahora que durante dos días he bajado mi ritmo de lectura, ahora hoy me encuentro que me está costando horrores volver a mi anterior ritmo y no sé si antes que se termine el día podré llegar a las 40 páginas previstas. Deseadme suerte.

3 comentarios:

Maravilloso Desgarro dijo...

¡Vamos muchacha tú puedes!
Lee bastante hoy, de castigo hoy tiene que avanzar al menos 80 páginas y echar el cuento mañana tempranito, espero con ansiedad.

Núria dijo...

Uy, uy, 80 páginas es mucho para mí. Tengo la excusa que no son páginas de Lemony Snicket, sino que todo es más denso ;)

La Medicina de Tongoy dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.